“Si te van a hacer un traje, mejor estate”

Recién llegadas del Curso de Verano UPV-EHU Cultumetría: Medición del impacto social de la cultura. El laboratorio como medio ¿y como fin? Antes de irnos a dormir, compartimos unas notas rápidas, parciales y borrosas, que esperamos sirvan para mantener abierto el debate.

Este mundo de indicadores y mediciones está a medio hacer. Por eso es importante que en la definición del QUÉ se mide y CÖMO se mide puedan ser partícipes todos los stakeholders (al menos todos los que lo deseen). Si hay que medir si o si, esto no puede quedar sólo en manos de los expertos. Lo que haya que RE-inventar hagámoslo colectivamente, de forma co-responsable.

Diseñar dispositivos de participación y mediación a la medida de las distintas cuestiones a tratar, con metodologías que favorezcan el afloramiento de la inteligencia colectiva, para conjugar los intereses individuales hacia el bien común. Organizar el diálogo más allá de lo informal, poniendo las condiciones para que la participación sea más efectiva, eficiente y afectiva.

Diseñar situaciones de intercambio, transferencia, co-creación, combinando el análisis y la observación, con los diálogos abiertos y la activación de dispositivos que permitan el prototipado, la experimentación, la participación de expertos cruzados con otros conocimientos situados… Dispositivos de escucha y diálogo para favorecer una planificación estratégica participada.

Hay que tener en cuenta a todo tipo de agentes, no solo a los interlocutores habituales. Hay que ir más allá de las cuotas de poder establecidas. Atender lo emergente sin perder la memoria.

Poner atención y cuidado en  desarrollar el principio de SUBsidiaridad y que los SUBalternos puedan tener voz.

 

Poner en valor el análisis, los datos, las mediciones. Pero no caer en el error de que eso suplante las conversaciones, los encuentros. Sólo de esa forma los fríos datos podrán mantener viva la llama de la confianza. Conseguir que las cuentas ayuden a contar historias, a hacer comunidad.

Hacer posible una neolengua trans que permita comunicar adentros y afueras, establecer diálogos entre los instituido y lo instituyente, hackear los límites y las normas, tramitar unicornios.

Cuidar las condiciones materiales de participación, siendo consciente de que no todo el mundo tiene los mismos capitales que poner en juego a la hora de participar y que es necesario asegurar unas condiciones mínimas de partida que aseguren al menos cierta equidad, accesibilidad, representatividad… (y es lo público quien debe asegurar, velar por estas condiciones).

Asegurar esas condiciones aparentemente puede ralentizar y/o complejizar los procesos a corto plazo, pero pone los cimientos del medio y largo plazo. Hay que saber encontrar el equilibrio,

Combinar los procesos pausados con otras acciones más directas, más de prototipado, de acupuntura, de prueba y error, que permitan renovar el ambiente.

No dejarnos arrastrar por la deriva ni economicista, ni empresarial, ni industrial. Reivindicar el RIS3 como política de desarrollo regional integral, no únicamente empresarial. No permitir que las ICC’s tomen la parte como el todo. Hacer visibles y efectivas la gran diversidad de culturas económicas.

No dejarnos llevar por el espejismo de los datos soufle, por las falsas apariencias de los retornos sobredimensionados.

Saber que si medimos (si es que hay que medir) es para maximizar la capacidad de sentir. Para hacer efectivo el derecho a la cultura (de manera equilibrada con su función como recurso). Para que ese derecho sea no solo a acceder a lo creado, sino a crear.

Para eso hace falta compatibilizar distintas formas de legitimidad, reconstruir los puentes entre lo público y la sociedad civil, generar nuevos espacios entre lo público, lo privado y lo común, propiciar cruces entre profesionales y amateurs, entre disciplinas culturales y entre los cultural con otros ámbitos de conocimiento.

Y una frase para cerrar, a modo de epílogo, sobre la participación de todos los agentes afectados en el diseño de patrones de evaluación, de indicadores de medida: “SI TE VAN A HACER UN TRAJE, MEJOR ESTATE”