Si, empezamos el curso y seguimos repitiendo. Viendo cómo están las cosas, el Progresa adecuadamente nos suena bastante autocomplaciente, nuestras sociedades Necesitan mejorar. Pero eso hay que verlo no como un suspenso, sino como parte del ilusionante proceso de transición en el que estamos inmersas, muy basado en lo RE-, también de REpetir, para ir aprendiendo, mejorando, cambiando. Porque transformar las maneras como hacemos las cosas no es fácil. Y de esos procesos de ir aprendiendo, probando, van las dos propuestas que compartimos hoy.

Empezamos con Bherria (jugando en euskera entre nuevo y pueblo). Un programa de formación o mejor, de intercambio y aprendizaje colectivo, dirigido a personal técnico y político de los ayuntamientos de Euskadi, dedicados a cuestiones de participación, desarrollo comunitario, voluntariado, etc. Un ágora para una nueva ciudadanía, un proceso de innovación social, en el que trataremos sobre nueva institucionalidad, colaboración entre lo público y la sociedad civil, nuevos entornos de comunicación, el papel en todo esto de las tecnologías… El programa está impulsado por la Dirección de Servicios Sociales del Departamento de Empleo y Políticas Sociales de Gobierno Vasco, en colaboración con el Consejo Vasco de Voluntariado; y nosotras formamos parte del equipo de trabajo, junto a otras compañeras de viaje con muchos años de experiencia en estas cuestiones. Empezamos casi ya (el 3 de octubre), pero aún queda alguna plaza disponible. Puedes apuntarte AQUÍ.

Seguimos con What if…? Vamos a contenido al mes. Esta vez le toca el turno a Margarita Padilla, que nos invita a reflexionar alrededor de lo libre y abierto, sus licencias, modelos y comunidades. Partiendo de las similitudes entre el modelo GPL y el Creative Commons, nos invita a interrogarnos sobre si ¿es posible adaptar la lógica del software libre a otros ámbitos productivos? ¿qué tipo de entramados relacionales y modelos de negocio se podrían generar en relación a los productos o servicios basados en las licencias tipo CC? ¿además del código libre, como hacemos sostenible el desarrollo de la cultura y el conocimiento libres? ¿pensamos, además de en licencias, en modos de articulación productiva y de redistribución de valor basados en las comunidades?

Y por cierto, apelando a la comunidad… ESKERRIK ASKO! a todas las que este verano os habéis animado a contestar nuestro formulario de repensamiento. En breve compartiremos los resultados. Pero sobre todo decir que se nota el “calorcito” de la gente que te arropa, desde cerca y desde lejos, conocidas y desconocidas. Eso ya, es un lujazo.