¿Podemos hacer de una practica colectiva una experiencia común?

Hemos estado en Valencia participando en PERIFERIES, que este año se ha organizado en forma de espacio celular, alrededor de una serie de open spaces, presentaciones, materiales, obras en exposición y otras actividades. Nuestra labor era facilitar la labor de un grupo, alrededor de la cuestión ¿Podemos hacer de una practica colectiva una experiencia común? Interrogarnos sobre qué es un colectivo y si como colectivo, podemos compartir valores, compartir ‘poder’, para repensar conjuntamente los ordenes políticos, sociales, economicos y culturales. O si debemos pensar en ese colectivo solo como gente que comparte un mismo espacio en el que estamos condenados a des-entender-nos. Saber-sentir un poco más si somos o podemos ser comunidad; si podemos seguir trabajando por la construcción o el mantenimiento de espacios comunes; si sabemos-queremos incluir la diferencia en nuestros proyectos; si realmente estamos dispuestas a compartir…

A continuación hacemos un pequeño resumen del trabajo realizado en nuestro grupo, presentando por un lado los qués, los temas que se pusieron sobre la mesa y dónde más o menos llegamos o nos encontramos, y por otro, los cómos, la dinámica del grupo y las metodologías que utilizamos para este encuentro.LOS QUÉS

Partimos de la muerte del discurso unitario y sus modelos, frente a un pensamiento difuso en el que todo es una herramienta. Pensamos que lo difuso, diverso y expandido puede que sea lo más natural, pero reconocemos el vértigo, el miedo a fluir en ese no-modelo.

Probablemente este miedo sea derivado de las costumbres y rutinas a las que nos acomodamos y de la resistencia al cambio. Por eso es necesario facilitar los cambios y la disrrupción en los qués y los cómos a los que estamos acostumbrad*s, propiciando tránsitos y acompañamientos que ayuden a completar las secuencias lógicas incompletas a las que estamos acostumbrad*s. Y hacerlo a través de prácticas y oportunidades concretas de autogestión y empoderamiento. Negociando y cuestionando continuamente, siendo conscientes de que las normas deben ser mutables y que no hay un marco lógico fijo, sino en todo caso, móvil y contextual, que si tiene fundamentos, son más éticos que morales.

Como manera de ir acometiendo este gran reto de cambio de paradigma, encontramos algunas herramientas e ideas que pueden sernos útiles:

  • Identificar con quien conflictuar ¿A quién afecta cada cuestión que vayamos a afrontar? Ser conscientes de que la red es el encuentro y que la red se enriquece con nodos-agentes diversos, inter/trans generacionales-culturales-genéricos-jerárquicos, donde los nodos-agentes tengan capacidad de hacer-forzar cambios de roles, performativizarlos y mutarlos en cada caso y según los retos.
  • Es la comunidad quien decide qué ser-hacer-querer, quien fija sus propios retos. Aprende, lleva a cabo y evalúa, ejecuta el proceso con sus éxitos y fracasos, se empodera, coge confianza y autoestima, se hace consciente de su poder para decidir nuevos seres-heceres-quereres, para afrontar lo común.
  • De una simple tarea puede emerger lo común, porque lo colectivo se hace común con la práctica, dedicando tiempo, esfuerzo, cariño, resursos, ganas, deseos, capacidades, conocimiento aplicado y transferible, etc. Queriendo el proceso: buscándolo (sin ir con las respuestas por delante y sin esperar recetas mágicas), haciéndolo nuestro, escuchando con humildad, practicando de manera lenta y placentera, y actuando con firmeza y de manera crítica.
  • Cuatro espacio-tiempos (combinados) desde los que pasar a la acción:
    1.- Ocupar y defender como acción de resistencia.
    2.- Zonas Temporalmente Autónomas como acción de experimentación.
    3.- Deriva como acción de exploración.
    4.- Espacio propio necesario para la subjetividad, la acción individual y el necesario refugio personal.
  • Cambiar no es necesariamente dejarnos arrastrar por la innovación, por la tiranía de lo nuevo; es abuelizar el mundo, recuperar costrumbres, utilizar el sentido común, poner una indígena en tu vida, aprender (mucho) de otras culturas, adaptar casos de la vida cotidiana, fijarnos en la naturaleza… Pero teniendo cuidado con la nostalgia, el tropicalismo, la metástasis y otros posibles perversos efectos colaterales.
  • De una de las metodologías salen varios dibujos que nos pueden ayudar a hacer una síntesis de lo tratado: una bandada de aves que componen la forma de un pez, una bola-souvenir de esas de nieve que continene lo común, varias representaciones de esquemas y sistemas procesuales más o menos lineales o complejos, una mochila llena de útiles personales, una nube.
  • Como cierre, una breve lista de referencias que fue surgiendo en las conversaciones y que puede servir para tirar del hilo:
    ‘El maestro ignorante’, Jacques Ranciere.
    ‘El antropólogo inocente’, Nigel Barley.
    ‘Almanario’, números 4 y 6 de los ‘Cuadernos de investigación en procesos de desarrollo’ de la Universidad Politécnica de Valencia.
    ‘Zona Autónoma Temporal’, Hakim Bey.
    ‘La democracia revolucionaria, un proyecto para el siglo XXI’, entrevista a Boaventura de Sousa Santos.
    ‘Elogio de la metamorfosis’, Edgar Morin.
    ‘¿Cómo hacerse un cuerpo sin órganos?’ Gilles Deleuze y Felix Guattari.
    ‘Las tres ecologías’, Felix Guattari.
    ‘La entropía del sistema económico’, Nicholas Georgescu-Roegen.

LOS CÓMOS

30 y 31 de marzo, en total 7 horas de duración (2tarde+3mañana+2tarde).
Se utiliza la metodología del Open Space.
Grupo abierto y mutable en el que han participado 12 personas (7 hombres y 5 mujeres). 4 personas que han estado en todo el proceso (incluyendo a la persona facilitadora) y ha funcionado mucho la figura de la mariposa y la abeja.

Viendo la inestabilidad del grupo y el relativamente poco tiempo para acometer la tarea (menos del previsto inicialmente y concentrado en 2 en vez de en 3 días -PERIFERIES nos sumamos a la huelga del 29-), desde el principio se optó por ver esa característica como un valor a incorporar en la dinámica del grupo. Por eso no se estableció una agenda de temas, sino que se fue desarrollando una conversación que devino en metodología:

  • Presentaciones y conversaciones de las que fueron emergiendo intereses y experiencias individuales que se van hilando con la propia conversación. Se dedican 4 horas a conversar. La persona facilitadora asume la labor de escribiente para el grupo (teniendo en cuenta que va a ser una figura estable a lo largo del proceso). Las conversaciones del 1er y 2o día se diferencian por el uso de dos papeles (A3 día 1 y A4 día 2).
  • Dedicamos 1 hora a la puesta en común del material recogido a lo largo de la conversación, organización colectiva de la información y selección individual de puntos de interés, que cada cual ordena como considera más conveniente (de lo sistémico a la enumeración) y comparte con el resto del grupo.

Las 2 últimas horas del trabajo colectivo (después de comer), las dedicamos a tratar de concluir la tarea y lo hicimos mediante dos ejercicios:

  • Cada persona, en base al material que ha recogido y presentado en la fase anterior, junto con las impresiones y matizaciones que haya recogido de las presentaciones de sus compañer*s, formula en medio A4 una idea más o menos concreta a desarrollar. La idea se va pasando en un carrusel sucesivo por tod*s las personas que conforman el grupo, que de forma rápida (1 o 2 minutos cada turno) van haciendo sus aportaciones (tod*s aportamos en todo). Una vez que cada idea regresa a la persona originaria, esta analiza las aportaciones y con el total, tiene que hacer un dibujo-esquema que represente y/o complete la idea de manera más o menos simbólica, abstracta o figurativa.
  • Para terminar, reuniendo todo el material agrupado durante la mañana junto a las ideas y dibujos realizados por la tarde, el grupo trabaja colectivamente en elaborar una representación que pueda servir como traducción explicativa del proceso y de las cuestiones tratadas.

Haciendo una lectura a posteriori sobre la dinámica y la metodología se podría decir que:

  • El grupo no ha llegado a conformarse-fijarse como tal. ¿Debía hacerlo? ¿era necesario? Para intentarlo ¿conseguirlo?, hubiese necesitado más tiempo para reconocerse, adecuar ritmos, personalidades y expectativas, generar complicidades y prevenciones, y establecer-consensuar colectivamente ciertas pautas de trabajo en común.
  • Es muy complicado centrar un tema (más allá de un título dado en forma de pregunta) con un grupo que continuamente varía su composición. Pero al mismo tiempo, esa continua variación, si además los agentes aportan diversidad (como era el caso) enriquece mucho las conversaciones, si estas se plantean como abiertas, abre-suma referentes y experiencias concretas de ámbitos variados, ayuda a identificar cuestiones clave que se repiten y rescatan a lo largo del proceso, etc.
  • El grupo ha funcionado muy bien a nivel relacional y de eficiencia, como suma de individuos dispuestos a compartir con el otro, a sumar y enriquecer; pero a la hora de acometer tareas en colectivo ha habido algunos momentos de ‘tensión’ y no se ha sabido elegir-proponer-resolver como grupo de manera eficaz ¿era posible hacerlo y/o forzarlo? Sea como sea, ante la incapacidad de elegir-renunciar, el grupo elige TODO (algo también muy-demasiado sintomático de las formas de comportamiento actual) y busca su estrategia para desplegarse. Es cierto que podemos encontrar cierto orden e intencionalidad: la parte delantera de la pared la ocupan las ‘conclusiones’, ideas-resumen y elementos simbólicos -incorporándose además hojas en blanco y rotuladores que invitan a continuar las aportaciones-; mientras la parte de atrás de la pared (que el grupo hace suya), sirve para desplegar todo el material conversacional ordenado colectivamente.
  • Además, en este último momento para concretar, la persona que hacía la facilitación se ausentó del grupo, con lo que este perdió a la persona que para bien y para mal, servía de referencia principal del grupo ¿se hacen los grupos dependientes de las personas de referencia? ¿es por culpa del grupo que delega demasiadas responsabilidades y se deja guiar o de la persona facilitadora que consciente o inconscientemente ocupa un papel demasiado central? ¿es debido a que al principio no se ha dedicado suficientemente a establecer las reglas del juego, tos tiempos y las tareas a acometer? ¿cómo romper esta dinámica?

A la vez, otros grupos han ido trabajando entorno a otras preguntas relacionadas, atravesadas unas por otras. Ahora toca la compleja tarea de hacer una relectura de los resultados, de sacar ‘conclusiones’, de transversalizar preguntas y respuestas, de plantear un punto y seguido, de compartir lo que salga, para sumarlo a la mochila y continuar.